Qué ver en Gante
De los casi 250.000 habitantes que tiene Gante, 45.000 son estudiantes, lo que la convierte en una de las ciudades más animadas del norte de Europa. Se considera que fue fundada en el siglo IX cuando Balduino I de Flandes levantó un castillo para proteger las abadías de San Pedro y San Bavón de las incursiones vikingas.
Al igual que Brujas pero sin llegar a su nivel, Gante también posee una interesante red de canales y un precioso centro urbano medieval, y además, es el lugar de nacimiento de Carlos V, del que más adelante os contaré una curiosa anécdota. Su tamaño y cercanía a Bruselas la hacen perfecta para hacer una excursión de un día sin perderse lo imprescindible, y si se dispone de más tiempo, se puede combinar con una escapada a Brujas.
Tabla de contenidos
- 1 Cómo llegar
- 2 Qué ver
- 2.1 Muelles Graslei y Korenlei
- 2.2 Sint-Pietersabdij
- 2.3 Veldstraat
- 2.4 Iglesia de San Miguel
- 2.5 Puente de San Miguel
- 2.6 Korenmarkt
- 2.7 Stadhuis
- 2.8 Iglesia de San Nicolás
- 2.9 Torre Belfort
- 2.10 El pabellón municipal
- 2.11 Casa Gremial de los Albañiles
- 2.12 Catedral de San Bavón
- 2.13 Castillo de Gerardo el Diablo (Geeraard de Duivelsteen)
- 2.14 Iglesia de Santiago (Sint-Jacobskerk)
- 2.15 Calle de los graffitis
- 2.16 Groot Kanon (Dulle Griet)
- 2.17 Manneken Pis
- 2.18 Castillo de Gravensteen
- 2.19 Patershol
- 2.20 Prinsenhof
- 2.21 Rabot
- 2.22 ‘t Toreken
- 2.23 Vrijdagmarkt
Cómo llegar
La manera más sencilla para llegar es en tren, ya que la frecuencia es alta y funciona bastante bien. Desde la Estación Sur de Bruselas tan sólo se tarda media hora y el pasaje cuesta 8’9€. Hay dos estaciones: Gent-Sint-Pieters y Gent-Dampoort, siendo la primera la principal y más cercana a la zona universitaria y la segunda está más cercana al centro histórico (unos 15 minutos andando).
Qué ver
Muelles Graslei y Korenlei
Las calles Graslei y Korenlei recorren las orillas del canal y significan muelle de las hierbas y muelle de los granos respectivamente, en honor a los productos con los que se comerciaba allí en la época medieval.
Ambas conforman la típica postal con edificios antiguos de bellas fachadas con la torre sobresaliendo por encima de ellas y el puente que lleva a la Iglesia de San Miguel. Desde allí salen los barcos que recorren los canales, así que si disponéis de tiempo y el clima se comporta, un paseo en barca puede ser una buena manera de conocer la ciudad.
Sint-Pietersabdij
La abadía de San Pedro se construyó en el s. VII con el objetivo de cristianizar a los habitantes paganos de la región, aunque ahora es un centro cultural. La planta baja de la abadía puede visitarse gratis (el claustro y su patio, la exposición permanente “Entre el cielo y la tierra” y el jardín).
Veldstraat
Esta calle comercial peatonal se sitúa en el centro histórico de Gante. Allí están presentes la mayoría de las grandes cadenas textiles, situadas en edificios antiguos cuyas fachadas originales están muy bien conservadas.
Iglesia de San Miguel
Puente de San Miguel
Situado al lado de la iglesia que acabo de nombrar, este puente es un lugar idóneo para sacar buenas fotos del canal principal de Gante, ya que desde allí se ven las tres torres de la ciudad: las de las iglesias de San Bavón y San Nicolás y la del Belfort.
El Puente de San Miguel es el lugar perfecto para las almas románticas y también para las cámaras. Aquí puede tomar toda una serie de selfies espectaculares, ya que, mire hacia donde mire, está rodeado en 360° por la encantadora belleza de Gante. Las vistas se vuelven aún más mágicas al caer la noche, cuando todos los monumentos históricos se iluminan con una luz especial.
Korenmarkt
Su nombre significa mercado del grano porque era el centro de reunión de los comerciantes que llegaban al muelle principal. Ahora es la plaza mayor de la ciudad, llena de tiendas y terrazas para tomar algo.
Destaca especialmente el edificio de la antigua oficina de Correos con su campanario de 52 metros. Está decorado en distintos estilos arquitectónicos y ahora se ha transformado en hotel de lujo y centro comercial.
Justo enfrente del edificio se encuentra otro de los McDonald’s más bonitos que he visto, y ya van siendo unos cuantos… Pero en general me gusta cómo son capaces de adaptarse al entorno en que se sitúan, respetando la estética del lugar.
Stadhuis
El Ayuntamiento de Gante es impresionante, al igual que el de Brujas y de muchos otros lugares de Flandes. Se compone de dos partes bien diferenciadas: la fachada del lado de la Hoogpoort muestra el tardío gótico flamígero de principios del siglo XVI, que contrasta con el estilo renacentista de la fachada de la Botermarkt. En esta ala más reciente (1559-1618) se ven columnas de tres cuartos y pilastras dóricas, jónicas y corintias, inspiradas en los palacios italianos.
Iglesia de San Nicolás
Muy cerca de Korenmarkt está una de las iglesias más representativas de la ciudad. Construida con piedra azul calcárea de Tournai, es uno de los más bellos ejemplos del gótico escaldiano, y pese a que ha sufrido varias restauraciones, mantiene su estilo desde que se construyó en el siglo XIII. En uno de sus laterales se encuentra una preciosa cafetería acristalada en la que se puede disfrutar de unas maravillosas vistas.
Torre Belfort
Este campanario es la torre más famosa de Gante. Inicialmente tenía una función religiosa, pero con el tiempo y el aumento de la población, las campanas se comenzaron a utilizar también para marcar las horas, recolectar y guardar los fueros o dar aviso de incendio. Desde 1402 se custodiaron aquí los fueros y privilegios municipales, función similar a la del campanario de Brujas.
Está coronada por un dragón dorado colocado en la torre en 1377 como guardián simbólico de la ciudad. Esta torre también alojaba una gran campana de tormenta, la Grote Triomfante, que ahora está situada en la plaza Emile Braunplein.
Tiene unas vistas preciosas, desde allí se pueden ver todos los canales y tejados, así que os recomiendo armaros de paciencia y subir los más de 300 escalones que os llevarán hasta sus 91 metros de altura.
El pabellón municipal
Casa Gremial de los Albañiles
Como curiosidad, en el Graslei se encuentra una réplica exacta. Fue construida según los planos originales para la Exposición Universal de 1913, puesto que la original había caído en el olvido hasta que salió a la luz en 1976 durante unas obras de reforma.
Catedral de San Bavón
Construida sobre una primera iglesia del s. X y una románica del XII, es la iglesia parroquial más antigua situada en el corazón de la ciudad. En la Edad Media Gante era una ciudad muy próspera, lo que hizo que la Iglesia de San Juan fuese convertida en el majestuoso edificio gótico de la Catedral de San Bavón entre los siglos XV y XVI.
El edificio es impresionante tanto por fuera como por dentro, ya que en su interior aloja una serie de tesoros para los amantes del arte: el altar mayor, el púlpito rococó en roble, una gran obra de Rubens (La entrada de San Bavón en el monasterio de Gante), el Tríptico del Calvario de Justo de Gante, la lámpara gótica… y por supuesto, la obra más famosa a nivel mundial: la Adoración del Cordero Místico de los hermanos Van Eyck.
La entrada a la catedral es gratuita, pero si quieres ver el retablo hay que pagar 4€. Como curiosidad, en este lugar fue bautizado Carlos V el 7 de marzo de 1500.
Castillo de Gerardo el Diablo (Geeraard de Duivelsteen)
Iglesia de Santiago (Sint-Jacobskerk)
Calle de los graffitis
Como ya he comentado en más de una ocasión, cada vez me gusta más el street art, aunque en este caso no es exactamente lo mismo, puesto que las obras se pintan unas encima de otras.
En la calle Werregarenstraat los artistas callejeros pueden pintar libremente las paredes, y como consecuencia, el resultado dista de ser una obra armoniosa para convertirse en un caos visual, pero hace las delicias de los instagramers. Esta es mi opinión personal, claro está, cada uno que juzgue por sí mismo si merece la pena la visita o no. Cuanto menos creo que es curioso de visitar dado el contraste con los edificios y calles que respiran años de antigüedad.
Groot Kanon (Dulle Griet)
Pese a sus dimensiones puede que os pase desapercibido este cañón de color rojo. Se encontró cerca de la ciudad en el siglo XV, cuando buscaban defenderse del asedio de los españoles. Pesa nada más y nada menos que 12.000 kilos y fue usado tan sólo una vez y sin ningún éxito, ya que el proyectil cayó al suelo nada más salir de la boca del cañón.
Se le conoce como «Margarita la Loca» («Dulle Griet») y se le ha puesto una tapa porque la gente lo utilizaba como basurero e incluso llegaban a dormir allí los indigentes.
Manneken Pis
Pese a haber estado en Bruselas, no me estoy confundiendo, puesto que en Gante también hay una versión de la estatua del niño meón. Por lo visto el hijo de Felipe de Alsacia era muy travieso y decidió bajarse los calzoncillos en una procesión que dirigía el abad de Gante.
A este simpático niño se le recuerda con cariño y por eso le han dedicado una estatua en la entrada del número 17 de la calle Kraanlei.
Castillo de Gravensteen
Es el único castillo medieval con foso que queda en Flandes prácticamente intacto. Se construyó en medio del río Lys para que los Condes de Flandes estuvieran protegidos de posibles ataques externos. Con el paso de los años tuvo varios usos, desde prisión hasta complejo industrial (wtf!). Afortunadamente se ha recuperado como patrimonio de la ciudad y se puede visitar.
La entrada cuesta 10€ y se pueden ver la portería, la muralla, la torre del homenaje, la residencia condal y los establos, además de una colección de armaduras.
La antigua despensa alberga una colección única de instrumentos de tortura y en la sala de audiencias puede admirar una colección de objetos utilizados durante los juicios. Además acoge también gran cantidad de actividades culturales, eventos e iniciativas, y muchas parejas gantesas eligen este sitio para casarse.
Patershol
En los alrededores del castillo se encuentra este bonito barrio que mantiene el trazado medieval original, con calles estrechas y adoquinadas, lleno de tiendecitas y restaurantes de moda.
En su momento estuvo habitado por el gremio de los tejedores, aunque ahora se ha convertido en una zona más chic. Lo mejor de todo es pasear tranquilamente por sus calles, sentarse en alguna terraza y observar todo lo os rodea.
Prinsenhof
Este apacible barrio fue en otrora la Residencia de los Príncipes, que contaba con una extensión aproximadamente de 2 ha y estaba rodeada de murallas. Tenía más de 300 habitaciones, un parque zoológico y un vergel. En la pequeña placita Prinsenhofplein se encuentra una estatua del Emperador Carlos V, regalo de la ciudad de Toledo a su lugar de nacimiento.
En el siglo XVII, esta residencia cayó en decadencia y terminó siendo vendida, y a finales del XVIII corrió el mismo destino que el Castillo de los Condes de Flandes, puesto que en sus ruinas se alzaron una refinería de azúcar, una fábrica de jabón y una hilandería de algodón. De todo ello sólo queda la Donkere Poort (Puerta Oscura), llamada así en el siglo XIX por su aspecto a causa de la contaminación de las fábricas.
Frente a dicha puerta se encuentra la estatua llamada el Stroppendrager, con una soga al cuello y he aquí la anécdota de la que os hablaba al inicio del post. ¿Por qué está esa estatua tan rara en medio de un campo rodeado de edificios? -me pregunté- pues aquí va la respuesta:
Carlos V no era precisamente popular entre sus súbditos ganteses. En 1539 los nobles y representantes gremiales se rebelaron contra él hastiados de pagar impuestos para sufragar sus guerras en el extranjero. La revuelta fue sofocada enseguida, pero esto no fue olvidado por el Emperador y el 3 de mayo de 1540 mandó desfilar descalzos hacia Prinsenhof a numerosos ciudadanos notables vestidos con un camisón y una soga al cuello como la de los ahorcados para advertir de que no daría nuevas oportunidades.
Diecisiete de ellos fueron decapitados y uno pereció en la hoguera. Hoy en día los ganteses están orgullosos de su nombre de guerra de stroppendragers (“los que llevan la soga”), y de ahí nace esta estatua, que con la cabeza alta y la soga al cuello mira al Prinsenhof (el lugar de nacimiento del emperador Carlos V) y a su estatua situada en la plaza Prinsenhofplein, como desafiante.
Rabot
Una vez que pasamos la Donkere Poort con su curioso habitante llegamos al Rabot. En 1488 Maximiliano de Austria intentó asaltar la ciudad durante 40 días sin éxito, descubriendo sin embargo un punto débil de la muralla, por lo que al año siguiente se construyeron estas dos torres para reforzar la protección de la ciudad.
‘t Toreken
Hoy en día acoge el Centro de Poesía, especialmente la de Flandes y Holanda. Es un centro de documentación, una tienda de poesía y una editorial. El centro también publica un periódico de poesía y ofrece paquetes con programas literarios y educativos.
DinkyViajeros
Nosotros coincidimos contigo Rocío: aunque Brujas es una ciudad de cuento, nosotros disfrutamos mucho más la visita a Gante, porque estaba menos masificada y tenía un ambiente universitario bastante chulo.
Por cierto, la calle Werregarenstraat lleva con los graffitis desde 2015 como mínimo, que fue la última vez que estuvimos nosotros en Bélgica. No es que sea una visita imprescindible pero sí es un lugar curioso que ver en Gante. 😉
Saludos.
Jordi
Qué maravilla de ciudad. Las vistas desde el puente de San Miguel son una de las panorámicas urbanas más bonitas de Europa. Qué difícil es escoger entre Brujas y Gante. Por suerte ambas se pueden visitar en un mismo viaje. lo que no recuerdo haber visto jamás en esta calle de los graffitis y esto que he estado tres veces en Gante. Quizás sea bastante actual.
Rocío
Estoy de acuerdo en que es una maravilla de ciudad, y aunque Brujas es de cuento, me quedaría con Gante porque es más grande y al ser ciudad universitaria tiene más ambiente. Realicé el viaje en 2019, así que no sabría decirte desde cuándo está la calle de los graffitis, aunque investigaré a ver. Un saludo
Los viajes de Héctor
Para mí Gante es una de las 5 ciudades más bonitas de Europa (sin contar las mega urbes), los muelles Graslei y Korenlei, sus iglesias, la Torre Belfort que creo que es imprescindible de subir…El precioso Castillo de Gravensteen (me encanta el medievo)…
Lo que no recuerdo haber visitado es el Castillo Geeraard de Duivelsteen…no me importaría volver.
Rocío
Tanto Brujas como Gante me enamoraron, sus construcciones medievales son impresionantes y como bien dices, los muelles y el Castillo de Gravensteen son imprescindibles. El llamado castillo de Gerardo el Diablo está justo detrás de la Catedral de San Bavón, enfrente del monumento a los hermanos Van Eyck, y dado que tiene un horario limitado, es complicado cuadrar su visita, pero yo también me lo apunto para una segunda visita a la ciudad, que me quedé con ganas. Saludos